Bienvivido y Bienvivida

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lunes, 11 de agosto de 2014

LA MALDAD DEL NIÑO (55)



El niño es señalado como malo generalmente cuando no obedece a nuestro mandato de padres o a la idea de cómo deberían ser, según los valores de la familia o de lo social (Escuela, trabajo, otros grupos de pertenencia). A los niños "malos" que "no obedecen" a nuestro sistema de Educación, se les estigmatiza con síntomas patológicos como hiperactivos, y la mayoría de los padres se lo tragan. Claudio Naranjo nos recuerda insistentemente que no se educa para la sabiduría ni para la comprensión, se educa para pasar pruebas, para pasar test, y dice al respecto:​"​Los educadores no reconocen que los trastornos de la atención son una respuesta sana a una educación insana​"​. Esa sana rebeldía de no atender a una educación alienada los transforma en niños enfermos o malos. 

OLEA


 El lúcido poeta y escritor Thomas Bernhard decía: "Los viejos se vuelven cada vez más malvados. Los niños son malvados, los seres más malvados que existen. El viejo, se dice, vuelve a ser niño; así pues, recobra la maldad de la niñez y tiene además la terrible maldad de la vejez, que es el mayor atractivo de las personas". Y ya sin concesiones remata: "Un niño bueno es para estrangularlo y un viejo lo mismo". 

OLEA


 Como muchos genios, Fritz Perls era francamente marginal y así lo manifestaba siempre que podía, tanto en público como en la intimidad. No se plegaba demasiado a las convenciones y ritos sociales y expresaba siempre de forma directa (y hasta brutal) lo que sentía. Desconfiaba mucho de los "niños buenos" que portaban los adultos. 

OLEA

En mi familia somos dos hermanos y yo cargué con el peso del bueno y mi hermano con el peso del malo. Difícil la relación entre ambos y pesada la carga. Mi madre me decía que cuando yo era pequeño insistía en que de mayor quería ser malo.

No pretendo ensalzar la maldad sobre la bondad, estaríamos cayendo en la misma trampa de la defensa que se ha hecho de ser sólo bondad, que a través, sobre todo de la religión, se ha magnificado tanto, a favor de una demonización del mal. No voy a entrar en detalles de la perversión que ha producido esta actitud de ser sólo buenos dando la espalda a la maldad. Darle un sitio a la maldad o a la sana agresividad como un rasgo natural de conservación, no confundamos con violencia, es el propósito de este post. Como animalitos que somos.

Ver más chistes de Olea: OLEÍSMOS

Emilio Blázquez

2 comentarios:

  1. "Los educadores no reconocen que los trastornos de la atención son una respuesta sana a una educación insana", esto es real, ha pasado siempre y ahora no solo se le exige al niño atención a una educación sino a estar "educándose" desde que se levanta hasta que se acuesta. No tiene derecho a su espacio, a estar solo para desarrollar su propia creatividad a través de la imaginación.
    Son pequeñas máquinas programadas para agradar a los adultos que les exigen ser los mejores, en la escuela, en el conservatorio, en la piscina etc con todo su tiempo colonizado, organizado, impuesto por los adultos.
    No hay nada mas triste que ver a un niño que vive pendiente de hacer felices a los adultos pero que no tiene tiempo de vivir su infancia.

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  2. Muy buen apunte lo de permitirles estar solos para desarrollar la creatividad.
    Gracias por tu comentario enriquecedor.

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