Si hay un maestro que se denomine como ecléctico y que sus raíces estén impregnadas de un fuerte sincretismo, entre heterodoxia y ortodoxia, ese es Claudio Naranjo (médico, músico, filósofo, artista, psiquiatra, escritor...), sobre todo es un buscador por vocación. Me nutrí de sus enseñanzas en Protoanálisis, programa FHN (Fisher, Hoffman, Naranjo), programa de Psicoterapia Integrativa SAT, retiros de meditación. En su primer libro titulado La Única Búsqueda, paradójicamente al título, habla acerca de los diferentes vehículos, formas y recursos que el viajero tiene a su disposición. Le conocí gracias a Paco Peñarrubia, mi primer maestro y terapeuta que dio a mi vida un cambio de sentido significativo .
Le he oído decir a Claudio Naranjo que en su inicios de búsqueda desafió a la idea imperante de la época en la que sólo se podía llegar al auténtico despertar por un único camino (Yoga, sufismo, cristianismo, budismo, etc). Comprobó que se puede llegar a la realización a través del sincretismo de distintas disciplinas.
En la web de la Fundación Claudio Naranjo leo: "Designado como maestro por varias tradiciones del budismo tibetano, a Claudio Naranjo también se le reconoce como una figura de sabiduría entre las iglesias sincréticas de Brasil y algunos linajes chamánicos de Latinoamérica, así como entre los sufíes. Pionero de la psicología transpersonal y un integrador entre psicoterapia y espiritualidad".
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